La Comisión Provincial de la Memoria (CPM) cruzó duramente a la ministra de Seguridad, Patricia Bullrich, por sus declaraciones en torno a la muerte de Thiago Correa (7), el niño alcanzado por una bala de la Policía Federal mientras esperaba un colectivo con su padre en La Matanza

En un comunicado titulado "Esa cruel celebración de la muerte", la CPM vuelve sobre un tema por el que ya advirtió reiteradamente: el uso de armas reglamentarias por parte de policías fuera de servicio. 

"Las muertes que produce el Estado a través de sus agentes -y más la de un niño-, lejos de derivar en mensajes demagógicos y corporativos, deben producir una profunda revisión de los criterios definidos para el uso de las armas por parte de la Policía y autocríticas con relación a las políticas de seguridad que promueven el uso desmedido de la violencia".

El fragmento es una respuesta directa a los dichos de Bullrich, según quién "uno de ellos (N de la R: se refiere a los delincuentes) murió en la legítima defensa que realizó Facundo Aguilar Fajardo en el cumplimiento de su deber como integrante de la Policía Federal Argentina, porque son ellos los que generaron la acción delictiva, ellos salieron a la calle a matar".

El discurso de Bullrich obedece a una suerte de "doctrina Chocobar recargada", que enardece a los efectivos pero no parece conmover a los fiscales. De hecho, el que entiende en esta causa, Diego Rulli, mantiene a Aguilar Fajardo detenido e imputado por "exceso de legítima defensa". 

Entre los elementos que complican la situación del efectivo, se cuenta que todos los impactos de bala se registraron en la espalda y parte posterior del cuerpo y que el arma de los delincuentes no estaba en condiciones de ser disparada.

Este tipo de declaraciones, comunes en Bullrich, suelen intensificarse en tiempos de campaña electoral. De hecho, ella y el presidente llevan meses tratando de instalar que la Provincia es un "baño de sangre", contra lo que muestran las estadísticas. 

Además, causan malestar en el personal de las fuerzas, porque la ministra después los deja solos. Cada uno debe costearse su propia defensa, como ocurrió con el policía bonaerense Luis Chocobar, protagonista de un caso similar en 2017. Chocobar fue condenado, pero luego un tribunal superior ordenó revisar toda la causa. No volvió a vestir uniforme y hoy se gana la vida como vendedor ambulante.

Los hechos

El oficial Facundo Daniel Aguilar (21) fue sorprendido en el cruce de la avenida Crovara y Madrid, La Matanza, por cuatro personas que presuntamente quisieron robarle. En aquel momento, el efectivo, que estaba de civil y franco de servicio, sacó su arma reglamentaria y abrió fuego. Según testigos, se escucharon más de 10 disparos.

Producto de la balacera, Brandon Corpus, de 18 años, recibió seis disparos y murió en el acto, Uriel Montenovo, de 21 años, resultó herido en la pierna derecha, mientras que su compañero, Uriel Leiva, recibió un disparo en el abdomen y se encuentra internado en grave estado. Otro de los presuntos atacantes permanece prófugo.