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En la mañana del 7 de junio, en la plaza Belgrano de la capital salteña, comenzó la tradicional liturgia patriótica en homenaje al general Martín Miguel de Güemes. Con el izamiento de banderas, la entonación del Himno Nacional y la partida de la cabalgata hacia la Quebrada de la Horqueta, el gobernador Gustavo Sáenz dio inicio a los actos oficiales por el 204° aniversario del ataque que heriría de muerte al héroe gaucho.
Acompañado por su esposa Elena Cornejo, funcionarios provinciales, autoridades militares y agrupaciones gauchas, Sáenz no perdió la oportunidad de volver sobre su tradicional discurso en defensa de los intereses de salteñas y salteños.
“Güemes es un ejemplo de lucha, de soberanía, de libertad, pero por sobre todas las cosas, de unidad", expresó. Afirmó que por eso, "hoy más que nunca, tanto Güemes, como San Martín y Belgrano deben ser ejemplos para construir la Argentina que viene y que queremos”. Y destacó al prócer salteño como una de las principales figuras en la lucha por la independencia argentina.
Las palabras del gobernador en el marco del homenaje contrastan con sus recientes declaraciones públicas. Durante una gira mediática por la Ciudad de Buenos Aires -donde acompañó el plan de blanqueo mileísta-, Sáenz volvió a cargar contra la expresidenta Cristina Fernández de Kirchner y sumó también críticas al expresidente Mauricio Macri, a quienes acusó de no haber resuelto los problemas estructurales del país. “Gobernaron. ¿Tenían la posibilidad de hacerlo? Sí. ¿Lo hicieron? No”, sentenció, pidiendo “un sinceramiento de la política” y cuestionando la “hipocresía”.
Las críticas hacia Cristina Fernández no son nuevas, ya que de manera reiterada el gobernador viene afirmando que la exmandataria es una figura del pasado.
Los posicionamientos actuales de Sáenz lo alinean cada vez más abiertamente con el gobierno de Javier Milei. Viene defendiendo medidas como la reforma migratoria impulsada por el Ejecutivo nacional, e incluso recurrió a expresiones que rozan la xenofobia. “En Aguas Blancas, en una cuadra viven 600 familias”, aseguró, en un intento de justificar el recorte de derechos sociales a personas migrantes.
En esa línea, anunció que impulsará que se den de baja los beneficios sociales de la ANSeS a personas extranjeras no residentes en el país, aunque estas ayudas se otorgan solo a personas de nacionalidad argentina o a extranjeras que tengan un mínimo de dos años de residencia en el país. “La plata que se ahorraría con todo eso podría solucionar muchos problemas de los discapacitados y de los jubilados”, afirmó Sáenz.
En nombre de Martín y Macacha Güemes
El homenaje a Güemes, como cada año, incluye también un espacio para recordar a su hermana, María Magdalena Dámasa “Macacha” Güemes, quien falleció un 7 de junio de 1866 y es reconocida como una de las mujeres más importantes de la independencia argentina. En la plaza que lleva su nombre se dejó una ofrenda floral y se hizo una invocación religiosa encabezada por el vicegobernador Antonio Marocco. Los actos continuarán hasta el 17 de junio, fecha en la que se conmemora la muerte de Güemes en la Quebrada de la Horqueta, tras diez días de agonía rodeado de sus gauchos.
Macacha tuvo una destacada trayectoria pública en su provincia natal y en el ejército de gauchos de su hermano Martín Miguel de Güemes en el marco de la Guerra Gaucha. Entre discursos y evocaciones, la figura de los hermanos Güemes se reafirma como una referencia clave en la historia política del norte argentino.
El héroe gaucho nació en Salta en 1785, fue un militar y caudillo popular que lideró la resistencia en el norte frente a las invasiones realistas, organizando un ejército de milicias gauchas que defendió la frontera norte durante seis años. Su conducción durante la llamada Guerra Gaucha permitió sostener el frente interno de las provincias del Alto Perú, garantizando el avance de las campañas libertadoras de San Martín.
Sin embargo, su legado no se limita a su papel militar. Güemes representó una forma de liderazgo profundamente enraizada en el territorio, con una mirada federal, popular y autónoma, en abierta tensión con los sectores salteños y porteños que buscaban concentrar el poder político y económico. Su temprana muerte en 1821, producto de una emboscada realista, no evitó que su figura se convirtiera con el tiempo en símbolo de la lucha por un país más equitativo y federal.
Ese legado contrasta con el presente político provincial, en el que el gobernador Gustavo Sáenz sostiene acuerdos, tácitos y explícitos, con el gobierno nacional encabezado por Javier Milei, cuya orientación centralista y de ajuste fiscal ha afectado la coparticipación, los subsidios al transporte y los recursos para políticas públicas claves en las provincias.
Servicios, visibilidad y gestión territorial
Sáenz también busca marcar presencia en los barrios de la capital salteña, consolidando una estrategia de cercanía con la ciudadanía salteña. "Estar cerca de no es una frase. Es una forma de gobernar. Y lo hago todos los días, con hechos y con el corazón", expresó este fin de semana en sus redes sociales, luego de encabezar una nueva edición del programa "La Muni en tu Barrio", esta vez en el barrio 20 de Junio, en la zona este de la ciudad de Salta, acompañado por el intendente Emiliano Durand.
Según difundió el gobierno, más de tres mil personas se acercaron al Centro Vecinal para recibir atención directa del gobernador, del jefe comunal y de equipos técnicos del Estado provincial y municipal.
El operativo incluyó desde exámenes oncológicos y trámites del Registro Civil hasta asesoramiento sobre planes de vivienda, subsidios energéticos y el pase libre de la empresa de transporte SAETA. En particular, el Ministerio de Salud desplegó su camión oncológico, priorizando la atención a mujeres mayores de 50 años y con antecedentes de cáncer de mama. También atendieron equipos del CUCAI, el Instituto Provincial de Vivienda, Aguas del Norte, el Ente Regulador de Servicios Públicos, la Secretaría de Trabajo y la empresa de transporte público.
El enfoque de estos operativos se apoya en la inmediatez de la respuesta estatal, promoviendo una gestión de cercanía y atención personalizada. Pero también funciona como un escenario donde Sáenz refuerza su capital político, rodeado de funcionarios y cámaras.
